«El perfume tiene mayor efecto en mí que cualquier cambio de vestuario». De esta manera, crear un perfume acerca a Cuthbertson a su personaje.
«Hablar de mi personaje en términos de perfumes me obliga a comprender el papel como no podría hacerlo de otra manera». Además, Cuthbertson utiliza las fragancias para potenciar la interpretación.«Cuando hice el papel de la reina Hermione en Cuento de invierno, me resultaba fácil interpretar su lado maternal, pero me olvidaba de que era una reina», reflexiona. «Por eso, quise crear un perfume que evocase la realeza. En cuanto me lo apliqué, enderecé mi postura».
Docenas de fragancias han aguardado siempre en el tocador de su hogar. El perfume desempeña un papel crucial en la identidad de la bailarina desde que a los 10 años pidiera su primer perfume de regalo de cumpleaños.
Un año después, a sus 11 años, dejó su Torquay natal y comenzó a asistir a la Royal Ballet School en Londres. «En la residencia del colegio, no teníamos habitaciones individuales; solo un estante encima de la cama para colocar nuestras cosas. Mis perfumes ocupaban el lugar de honor. Todas teníamos que ponernos las mallas y llevar moño, el perfume era la única manera de mostrar tu personalidad».
Cuthbertson, con su pasión por las fragancias y la danza, es la musa perfecta del nuevo perfume floral de Creed, Wind Flowers.
Inspirado por la fuerza y la gracia femenina de las bailarinas Wind Flowers recrea sensaciones florales a través de la danza, y los movimientos de las telas evocan flores bailando al son de la brisa. Wind Flowers presenta notas de salida de dulce jazmín, cítrica flor de azahar y suave melocotón, un corazón de nardo y rosa, y una nube de iris y praliné suculento y cremoso que abre el camino a una base amaderada y almizclada.